El famoso autor de boleros y pasodobles Jorge Sepúlveda le dedicó una canción a la capital de Cantabria que comienza diciendo “Santander eres novia del mar”. No le faltaba razón al bolerista, pues esta ciudad está ligada indiscutiblemente al líquido elemento y es conocida como la Perla del Cantábrico.
Y sin embargo, la ciudad tiene mucho más que ofrecer al visitante, hasta el punto de que muchos se sorprenden por la cantidad de atractivos que posee. Hoy te mostramos qué ver en Santander e iremos más allá de sus destinos más conocidos.
El Faro del Cabo Mayor
Las playas más conocidas de Santander son la del Sardinero y la del Camello, pero esta ciudad, enclavada en la Península de la Magdalena, ofrece también otros arenales de sorprendente belleza. Una de ellas es la playa de Mataleñas, localizada en la ensenada del mismo nombre. Desde este rincón podrás conocer otras playas y acantilados a través de una senda marítima para llegar finalmente al el Faro de Cabo Mayor, uno de los espacios más icónicos de la capital cántabra.
El funicular de Río de la Pila
Este atractivo turístico es otro de esos lugares curiosos para visitar en Santander. Fue inaugurado en 2008 y su acceso es completamente gratuito. Está localizado en la parte antigua de la ciudad y permite divisar todo Santander y la bahía desde una perspectiva diferente. Las mejores vistas panorámicas de la ciudad se contemplan desde este punto.
El funicular tiene cuatro paradas, funciona de 6 de la mañana hasta medianoche y su trayecto apenas dura unos minutos. En su ascensión, la instalación salva 78 metros de altitud.
La playa del Puntal
Un tercer rincón imprescindible en Santander es la playa del Puntal. Si bien no está situada en la propia ciudad, pues se enclava en medio de la bahía, el acceso sí puede ser directo desde Santander, a través de barcos que salen cada 10 minutos junto al centro Botín y cuyo trayecto tiene una duración de unos 10 minutos. Otra opción es llegar andando directamente desde la vecina localidad de Somo.
En El Puntal vas a disfrutar de un extenso arenal de más de dos kilómetros de extensión, todo un paraíso costero natural que además está equipado con dos chiringuitos en los que adentrarse de lleno en la gastronomía cántabra.
Parque Atlántico de las Llamas
Junto al Estadio del Sardinero, donde juega sus partidos como local el Racing de Santander, que está también situado próximo a la playa del mismo nombre, se sitúa el Parque Atlántico de las Llamas. Muy cercano a este espacio se localiza igualmente la Universidad de Cantabria.
Esta zona verde es uno de los pulmones de la ciudad. Su extensión es de unas 11 hectáreas y está ampliamente equipado con zonas de juego y un restaurante. El parque es un lugar magnífico para avistar aves acuáticas, practicar deporte, descansar o pasar una jornada en familia. Muy próximo al parque se encuentra también el Escenario Santander, una importante sala de conciertos en la ciudad.
Hasta aquí las recomendaciones sobre qué ver en Santander. Nos dejamos fuera las visitas más populares, como el centro de la ciudad, la catedral, el Palacio de la Magdalena o la Grúa de Piedra porque estamos convencidos de que esos lugares ya formarán parte de tu lista de fundamentales.
Escríbenos tus comentarios